Cabellos lisos y rizados en las puntas: ¿cómo cuidar los mechones para evitar la resequedad?
El cabello liso y rizado en las puntas requiere un cuidado especial debido a la sequedad.
La hidratación minimiza el aspecto seco del cabello lacio en la raíz y con puntas rizadas
Un poco de aceite de coco en las puntas es perfecto para nutrir el cabello de doble textura.
El lavado también contribuye a la sequedad del cabello que es liso y rizado al mismo tiempo.
El agua caliente provoca un exceso de grasa en las raíces y reseca las puntas del cabello.
Apuesta por el texturizado de hilos para realzar hilos rectos y rizados en las puntas
En la transición capilar, es común tener dos texturas antes de obtener un cabello completamente natural. Pero esto puede pasar incluso si no usas química, ¿sabes? Es solo que algunas mujeres también pueden tener el cabello liso en la raíz y rizado en el resto del largo, lo que puede causar sequedad en las puntas. ¿Qué hacer en este caso? ¡Mira todos los consejos aquí en se quedó diva!
Cuida el cabello con una hidratación regular
Mantener una frecuencia de tratamientos es lo que ayuda a mantener los hilos siempre sanos y bonitos, sea cual sea la textura. Pero no siempre tenemos el tiempo y la paciencia para seguir estrictamente un programa de cabello completo.
No hay problema, pero si tienes que elegir un tratamiento para hacerte, apuesta por la hidratación. Como los mechones están más secos en las puntas, la mascarilla concentrada te devolverá el agua y los nutrientes que el cabello necesita. Si lo prefieres, las recetas caseras también ayudan mucho.
El aceite de coco es un excelente aliado para la sequedad
Como el aceite vegetal tiene más cuerpo, nutre el cabello por completo. Pero, si tienes el cabello liso que solo se riza en las puntas, no necesitas usar el producto en todo el largo.
Solo concentra el aceite de coco en las puntas y, si es posible, duerme con el producto en el cabello. Al día siguiente, lavar normalmente como de costumbre. Las puntas quedarán mucho más suaves y con bonitos rizos, sin ese aspecto de rajaduras.
¡Cuidado con el agua caliente!
Un mal hábito es lavarse el pelo con agua caliente. Un baño tibio sí que es delicioso, pero la temperatura alta suele dañar el cabello y aumenta la oleosidad de la raíz, más aún si el cabello es más lacio en la región.
Además, el agua caliente también reseca demasiado las puntas, ya que abre la cutícula de las hebras. Por eso, regula tu ducha y trata de lavarte el cabello siempre con agua fría, para darle brillo. Si no tienes manera, ponlo en agua tibia, pero evita el calor, ¿de acuerdo?
Apuesta por el texturizado de los hilos
También puedes equilibrar las dos texturas del cabello invirtiendo en texturizar el cabello. Aprovecha la versatilidad de ser rizado o liso con algunos trucos fáciles.
Si desea los mechones más suaves y alineados, las herramientas térmicas pueden ayudar, pero no olvide usar un protector térmico para evitar que los mechones se sequen. Para un efecto más rizado, prueba alguna técnica de texturizado, como bigotes o papel higiénico. ¡Se verá hermoso!
